Cambio de papeles

Tras los últimos clásicos vistos en el final de la temporada pasada todos pudímos deducir que Mou no tenía intención alguna de intentar jugar al fútbol frente al Barcelona de Pep, todo eran muchas faltas y un juego más típico del Calcio italiano que del balonpié español. El Real Madrid jugaba con Pepe como medio para quitar del partido al crack culé Leo Messi, en esta ocasión no fue así, más que nada porque no hizo falta, ¿por qué? pues porque el balón cambió de dueño, el Barça ya no era poseedor de ese argumento que siempre había utlizado para matar al equipo rival, la pelota, sin ella todo el poderío pasó a manos del Real Madrid, el cual no sacó todo el jugo que hubiese podido de este enfrentamiento frente a su eterno rival. Los merengues tuvieron ocasiones para dar y regalar, sobre todo Benzema, el cuál tuvo dos grandes ocasiones en remates de cabeza paró Victor Valdés, en una ocasión tuvo que lucirse y en la otra la pelota le fue directamente a sus manos, por todo lo demás Karim hizo un partidazo, presionó, aguantó, pasó, buscó y, en general, mostró al Benzema que todo el Bernabéu está esperando desde el día en que se le fichó por 35 millones de euros.

Aunque el estilo del club de Florentino cambió siguen quedándole las malas costumbres, las excesivas faltas que cometen durante los 90 minutos que dura el partido, el que más muestra esta faceta es Pepe, en ocasiones lo hace bien aplicando la dureza necesaria pero en otras se precipita con faltas innecesarias, además de duras, que acaba provocando que le muestren la amarilla. También debo mencionar, a mi vista, que los árbitros ya conocen de sobra a este Real Madrid y en ocasiones pecan, en muchas veces una falta hecha por el Real Madrid se pita y si el Barça la hace idéntica no, ¿la razón? lo dicho, los árbitros tienen al equipo de Mou como 'faltero' y a la minima sacan a pasear el silbato, con esto no digo que los colegiados favorezcan al Barcelona ¡qué va! simplemente es que, como he dicho, ya todos conocen a este Madrid. Dejó caer algo... las clases de dramatismo que Daniel Alves nos ofrece sobre el terreno de juego también son dignas de ver.

Los aspectos técnicos del partido, fallos del Real Madrid, dejó demasiado hueco en la salida del balón desde la defensa azulgrana, Abidal el más común, Benzema tapaba el pase al medio que bajaba a recibir, el extremo merengue hacía lo propio con el lateral culé, así entre ambos jugadores del Real Madrid quedaba un hueco que aprovecharon los de Pep para salir con el balón controlado desde atrás.
Los errores del Barça, a mi parecer, fueron los exagerados intentos de salir con el balón controlado desde su propia portería, muchas veces Valdés hubiese tenido que pegarle patada y buscar así a un delantero o a un medio de su equipo para no poner en un aprieto a sus defensas, que con la fuerte presión del 'Mou Team' en ocasiones terminaban regalando el balón.