Hoy tan solo pude ver el Real Madrid - Atlético por culpa de los estudios y del fútbol sala pero el derbi madrileño me llenó. Nada mejor que ir a verlo con los amigos y si encima uno de los equipos muestra un juego como el que nos ha enseñado hoy el equipo de José Mourinho pues ya genial.
A priori ambos entrenadores proponían un encuentro igualado pero la las expulsiones terminaron por hacer la victoria del Madrid más fácil. Los colchoneros se adelantaron para sorpresa de muchos con un gol de, para mi, el mejor jugador de este equipo hoy, Adrián que batió a Casillas de una manera excelente. Poco le duró la alegría a Manzano ya que unos nueve minutos más tardes el colegiado iba a expulsar a Courtois por tumbar a Benzecat dentro del área en un penalti claro que la máquina Cristiano se encargó de marcar para poner el 1-1 en el marcador. El Atlético notó la inferioridad numérica y terminó encajando el 2-1 tras una carrera de Cristiano por la banda izquierda y un posterior pase que rodó por dentro del área hasta que encontró a Di María que no falló y la metió en la red. La segunda parte fue un monólogo del equipo madridista, presión y robo en campo del Atlético con un Xabi Alonso estelar -como casi siempre- que se encargó de repartir a izquierda y derecha para que las ocasiones llegasen. El Real Madrid era una auténtica máquina arriba pero atrás no se quedaba corto, geniales Pepe y Ramos, sobre todo este último que cortó todo lo que debía cortar, además dando buena salida al balón. El pero de este Real Madrid se lo lleva Lass que participó en le derbi como lateral derecho por la ausencia de Arbeloa, quiso hacer algo que no sabe, su función es destruir y no otra.
En cuanto al juego del Atlético de Madrid solo que de la única manera que podían crear peligro arriba era con velocidad, la puso Adrián pero ni Arda ni Salvio lo hicieron y terminaron pagándolo. Sí, las expulsiones fueron claves pero las últimas decisiones de Manzano no me gustaron.
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